Cada prenda en PALLAY es el resultado de un proceso artesanal que combina tradición, creatividad y colaboración.
Trabajamos de la mano con maestras tejedoras de Comunidades Altoandinas de Cusco en un proceso de co-creación, donde definimos en conjunto los colores, el orden en que aparecerán y las medidas. Desde la selección de fibras hasta los acabados, cada pieza refleja el talento, la paciencia y el legado cultural de las artesanas.
1. Selección de las fibras
Todo comienza con la elección de la materia prima: fibras naturales de alpaca y oveja, valoradas por su suavidad, resistencia y capacidad térmica. Estas fibras han sido utilizadas en los Andes durante siglos y son la base de cada pieza.
2. Teñido con tintes naturales
Los hilos se tiñen artesanalmente, logrando una paleta de colores única sin químicos contaminantes. Cada color tiene un significado y proviene de la misma naturaleza que rodea a las tejedoras.
3. Co-creación del diseño
Antes de iniciar el tejido, nos reunimos con las tejedoras para definir los detalles de cada pieza. Juntas, elegimos la combinación de colores, el orden en que se dispondrán y las dimensiones. Este paso es clave para asegurar que cada creación mantenga su esencia artesanal, pero también responda a una visión estética armoniosa.
4. Urdido y prearación del telar
Las tejedoras comienzan su trabajo clavando estacas en la tierra y armando el urdido, la base del tejido. Utilizando el telar de cintura, una técnica ancestral, van construyendo patrones llenos de historia, siguiendo el diseño previamente co-creado.
5. Tejido: el alma del proceso
Cada telar es tejido con precisión y paciencia, reflejando la creatividad y el estado de ánimo de la tejedora. Dependiendo del tamaño y la complejidad del diseño, esta etapa puede tardar semanas o incluso meses.
6. Transformación del telar en prendas únicas
Una vez terminado, el telar es entregado a las manos de nuestros artesanos, quienes lo convierte en prendas o accesorios para el hogar. Mediante técnicas de crochet, costura y acabados a mano, cada pieza se transforma en ponchos, chalecos, capas, cojines, caminos de mesa, pies de cama, posavasos, etc., sin perder su esencia original.
7. Un producto con historia y propósito
Cada prenda de PALLAY es única e irrepetible, no solo por su diseño, sino porque es el resultado de un trabajo colaborativo que rescata el arte textil andino. Al adquirir una pieza, no solo obtienes un textil artesanal, sino que también apoyas a mujeres tejedoras y contribuyes a la preservación de una tradición ancestral.